Connect with us

OPINIÓN

«Socialismo y Libertad», por Mario Mazzitelli

Published

on

La oligarquía parasita tiene muy claro sus intereses, por los que son capaces de cualquier exceso. Sí, incluso negar la vida y la dignidad de las personas, cuando ponen en riesgo sus privilegios.

Los que expresan “cárcel o balas” a quienes piden por un derecho, un aumento salarial o mejores condiciones laborales; muestran la magnitud de la servidumbre intelectual y política puesta a su servicio.

Si llegan a estos extremos con las personas de carne y hueso; que no harían en el mundo de las ideas. La necesidad de fundar una afirmación en pruebas, ha sido relevada para sus servidores. En términos generales lo que van buscando es el monopolio de la palabra. Propaganda basura multiplicada por el sistema mediático que dominan.

De esta manera no solo explican las bondades del régimen que cobija sus privilegios. También dicen “que es el socialismo”, “que ha hecho el socialismo” y “qué posibilidades tiene de mejorar la sociedad actual”. Así su más apañado y promocionado vocero ha definido: «El socialismo es una enfermedad del alma», dice que: «El socialismo va a fallar siempre» y acusa: “El socialismo deriva en totalitarismo y por ello mataron 150 millones de personas”. Más otro montón de imbecilidades, que de tanto ser repetidas se vuelven realidad en la subjetividad de muchas personas.

No es mi pretensión responder a tanta pavada en una pequeña nota de ocasión.

Sí diría que deberían tener un mínimo de honestidad intelectual, de la que carecen por completo.

Como nadie puede dar cuenta de lo que ocurrió en el mundo durante siglos, es lógico que al definir “que es el socialismo, su práctica pasada y sus posibilidades futuras” nos restrinjamos al ámbito de nuestro país. Aquí sí podemos decir que el término tiene dos puntos culminantes, en 1837 con Esteban Echeverría y su “Dogma Socialista” y en 1896 con Juan B. Justo y la fundación del Partido Socialista.

Por este camino podemos encontrar buenas referencias para iniciar el debate.

Entonces observemos lo que dijeron algunos socialistas argentinos con autoridad moral, política e intelectual.
Por ejemplo:

Esteban Echeverría dirá que “La Democracia es el régimen de la Libertad, fundado en la Igualdad de clases”.

Alfredo Palacios, para quien “El socialismo es, primordialmente, una aspiración ideal hacia un orden jurídico más justo, que reemplazará al capitalismo, mediante condiciones económicas, pero sobre la base de postulados éticos. Reclama una honda transformación orientada por la idea de libertad y de justicia, valores absolutos superiores a todo valor económico…”

O Mario Bunge: “Yo sostengo que hay motivos prácticos y morales para preferir el socialismo auténtico al capitalismo, y que la construcción del socialismo no requiere la restricción de la democracia sino, muy por el contrario, su ampliación, del terreno político a todos los demás. Esto es lo que llamo democracia integral: ambiental, biológica, económica, cultural y política. Semejante sociedad seria inclusiva: no habría exclusiones por sexo ni por raza, ni explotación económica, ni cultura exclusivista, ni opresión política.”

Podríamos seguir. Como vemos el socialismo no es una enfermedad. Es la combinación de una mirada crítica sobre el capitalismo, al tiempo que creativa, dando por hecho que el ser humano es capaz de cambiar la realidad en pos de algo superior.

El socialismo tiene la obligación de ser una propuesta superadora del capitalismo, atractiva y deseable. No existe el socialismo en abstracto, con una fórmula matemática, para todo tiempo y lugar. Esa es simplemente una tergiversación política, inducida por la oligarquía parásita que se atribuye la facultad de silenciar la palabra de los socialistas, para hacernos decir lo que nosotros nunca sostuvimos.

Tampoco es cierto que hayamos asesinado a 150 millones de personas. Que yo sepa desde 1837 a la fecha a los socialistas no se nos atribuye un solo crimen. Nadie escuchó que Juan B. Justo, Alicia Moreau, José Ingenieros, Mario Bravo, etc. hayan sido acusados de ningún asesinato.

Mentiras escabrosas como decir que somos hijos del totalitarismo. La gran consigna socialista fue: “No hay Pan sin Libertad, ni Libertad sin Pan”.

Lo que causa horror a la oligarquía es que la Libertad no se circunscriba a los dueños del gran capital, a los propietarios de la tierra, los medios de producción o el dinero. Extender la Libertad a los sectores postergados y explotados, empobrecidos y marginados; a esa Libertad le tenían y le tienen miedo. Por eso se apropian de la palabra. Y la difunden y multiplican por todos los medios que tienen bajo su “propiedad privada”. Una manera de privar de voz a los socialistas.

No hay Libertad, sin Igualdad ni Fraternidad. Ese dilema ya fue resuelto hace más de 200 años. Por eso nuestro himno al grito de Libertad le suma “Ved el trono a la noble Igualdad”. No se trata de una igualdad absoluta, como algunos pretenden para ridiculizar la idea. Se trata de un piso de igualdad desde el cual poder desplegar toda la potencialidad creadora de cada uno. Cuando ese piso de igualdad es perforado por el hundimiento social bajo la línea de pobreza, o peor aún de indigencia, la Libertad desaparece para ese sector de la sociedad. La necesidad extrema mata a la Libertad. Además, como la condición de la Libertad es su universalidad “Todos somos libres o no hay Libertad”. Podemos afirmar que el capitalismo colonial implantado en Argentina por la oligarquía parasita es la causa de falta de Libertad para las grandes mayorías populares.

Pero la vocinglería oligárquica no ceja en su intento por cerrar los caminos del socialismo. No solo hace cualquier tipo de alianza, interior o exterior, para impedir el desarrollo del socialismo en Argentina, no solo miente a raudales, no solo trata de desalojar el principio de Justicia que anida en todo ser humano; también trata de inducir a pensar que los ideales socialistas, en el mejor de los casos, son “utópicos”. Que allí donde se aplicó una tecnología para realizarlo, el fracaso fue estrepitoso. Se trata de propaganda interesada.

Siendo el movimiento socialista relativamente joven, puede ser que hayan existido experiencias fracasadas. Cómo las hubo en todos los intentos tecnológicos por llevar un ideal a la práctica. De hecho todo lo que nos rodea, creado por el ser humano para mejorar las condiciones de existencia, antes fueron utopías. Y ninguna fue exitosa en el primer intento.

Lo que no pueden negar es que también hay enormes éxitos. Bastante simple: mientras la ideología neoliberal se sostiene en la exacerbación del egoísmo individualista, defendiendo solo “intereses privados” aunque vayan en detrimento de otras personas y el ambiente; el socialismo plantea el principio de asociación de mutuo y múltiple beneficio. Por eso defendemos la cooperación democrática y participativa en todos los niveles; político, social, económico, cultural y ambiental.

La idea de seres aislados, vinculados entre sí por el mercado, al que concurrirían solo para obtener beneficios individuales y del que emergería una mano invisible para armonizar los intereses de todos; es una construcción fantasiosa. Absurda y ya refutada; que merecería un capítulo aparte.

Los pueblos, que tienen una intuición inteligente, se han desvinculado de esa idea. En todos los países del mundo. Al punto que han respaldado el papel del Estado para que este cumpla tareas de cierta equidad, que no lleven a la sociedad a desequilibrios tan injustos que terminen en una violencia generalizada.

Los neoliberales vernáculos, al servicio de la oligarquía parásita, tienen una doble moral al respecto. Menoscaban el papel del Estado hasta pedir su achicamiento o extinción, por un lado; y por otro piden que sea el garante de los privilegios de la propiedad privada, reprimiendo o llegando al “Terrorismo de Estado” si fuera necesario, para que sus ventajas injustas no sean menoscabadas. Doble moral que queda en evidencia cuando se sacan fotos en Tucumán con los mayores detractores de la Libertad de la historia Argentina.

Dicen que los socialistas estamos en contra de la propiedad privada. No es así. La organización de una sociedad moderna es impensable sin la existencia de propiedad privada. Aquella que le es propia a cada individuo o familia para realizar en plenitud su existencia. Pero sí nos hacemos algunas preguntas ¿Cuánta propiedad privada le corresponde a cada miembro de una sociedad? La cantidad es importante. Si es escasa o nula, no alcanza para un buen vivir. Y si es desmedida puede resultar en una concentración de poder, ajeno a todo principio democrático. En particular si hablamos de la tierra, de monopolios naturales, oligopolios, etc. Por lo demás, respetamos la propiedad privada existente, al tiempo que querríamos sumar propiedad común o cooperativa, hasta donde la realidad lo permita. Vivimos una etapa compleja, donde una sola forma de propiedad no resuelve la totalidad de los asuntos a encarar. Tenemos la mente abierta.

Nuestra exigencia es abordar la realidad particular y concreta en un tiempo y lugar, desde los mejores valores de la humanidad, desde principios éticos. No somos sabios ni infalibles, por eso confiamos en el pueblo la realización de la tecnología económico-social-institucional con la que mejorar la calidad de vida. Planteamos una Democracia Participativa en la que el Poder se encuentre en manos de las mayorías. Con responsabilidad individual y colectiva. Asignando el deber de cada uno, conforme su capacidad; y otorgándole bienes y servicios a cada uno, según su necesidad.

El drama nacional pasa por el parasitismo. Empezando por la oligarquía económica. Asociada en distintas entidades “empresariales”. Hay que observar que esta clase privilegiada, poco a poco, retomó las riendas del poder, después de haberlo perdido en 1983. Eso les permitió ejecutar su política neoliberal: desguace del Estado, privatizaciones, especulación financiera, etc. con sus consecuencias lógicas: concentración de la riqueza en pocas manos y empobrecimiento de las mayorías. Agreguemos que el pueblo al confiar en sus representantes, olvidó que en el mismo instante en que se sientan en los confortables sillones de la representación, adquieren parte de los vicios de los sectores del privilegio. Sea en la política, la Justicia, las asociaciones gremiales, empresariales, la burocracia estatal, etc.

El socialismo plantea al trabajo como la fuente fundante de la sociedad. Por eso nuestro corazón está junto al pueblo trabajador. Por eso seguimos sosteniendo que la tierra y el trabajo son el origen de la riqueza. Por eso para volver a poner las cosas en orden hay que combinar dos acciones: terminar con el parasitismo y enaltecer el trabajo.

Desde lo político el socialismo es una construcción democrática, colectiva y participativa. Los de arriba tienen intereses fundados en que no prospere. Para eso van conformando una plutocracia, con todas las herramientas disponibles: ideología, propaganda, consumismo, vicios, etc. Los de abajo, en cambio, deberían tener predisposición para su avance. Para eso deben concurrir varios factores. Liberarse de las falsas ideas transmitidas desde el régimen, asumir con claridad la defensa de sus propios intereses y manifestar, con voluntad, la intención de “retomar la senda democrática” en todos los órdenes. Para que la Democracia argentina resulte en un gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.

Sí, el Socialismo es la defensa irrestricta de la Dignidad Humana. Su método la Democracia y su finalidad la Libertad Creadora fundada en el Trabajo.

Por eso decimos que: mientras el capitalismo crea la ilusión de la libertad para pocos, el Socialismo es la Libertad para todos. Socialismo es Libertad.

Continue Reading
Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

OPINIÓN

«Poner el cuerpo», por Ezequiel Beer

Published

on

En un rico debate con una amiga se plateo que a lo largo de la historia son siempre los mismos los que ponen el cuerpo mientras que los Dirigentes son salvaguardados en pos de su proteccion futura como guias ineludibles del proceso en curso – Quizas sea el ejemplo de Lenin, Hitler, Churchill de los cuales seguramente dependia el curso a seguir de los acontecimientos pero no puedo dejar de pensar de como Evita y muchos otros sindicalistas pusieron el cuerpo abiertamente y condujeron a los millones de trabajadores argentinos para elevar el reclamo por la libertad del General Peron apostados sobre la Plaza de Mayo – Tan solo hubo un par de fallecidos y no fueron producto de enfrentamientos entre los mismos trabajadores.

Este historico suceso es claramente materializado en el erudito trabajo documental de Leonardo Favio sobre Peron donde afirma el caracter pacifico del hecho revolucionario mas importante de casi toda la historia contemporanea argentina que permitio no solo dar fin a un Gobierno Militar producto de una respuesta politica a la denominada Decada Infame sino el retorno de las elecciones libres y democraticas en la Argentina luego de casi 18 años y del primer triunfo electoral peronista que inauguro el proceso de mayor bienestar de las clases populares y del pleno desarrollo de las fuerzas productivas del pais –

La singularidad del Peronismo desarrollado entre los años 1946 y 1955 y de las transformaciones respectivas quizas nos puede llegar a considerar que este hecho inedito y de casi 80 años de vigencia- que ha sufrido innumerables perdidas en pos de su resguarda miento politico – ha sido fruto de una Revolucion en Paz donde convergieron activamente Dirigentes y Trabajadores en una puesta en comun desde la cual fueron participes activos bajo el mismo objetivo y de plena presencia publica- Sin dudas el Amor surgido entre Maria Eva Duarte y Juan Domingo Peron es el verdadero punto de inflexion de todo lo sucedido posteriormente-

La necesaria re generacion actual del Peronismo a la luz del presente tiempo no solo debera obedecer a cuestiones dogmaticas, programaticas o doctrinarias sino que el cadis sentimental sera la condicion necesaria ante la constitucion de una realidad deshumanizante – / Ezequiel Beer –

Continue Reading

OPINIÓN

«Pacto de Mayo, una maniobra inútil», por Félix González Bonorino

Published

on

El discurso que diera el Presidente Milei de espaldas a la Legislatura el 1º de marzo pasado fue una marca tanto en su forma, los participantes y su contenido.

Como forma, su posición de espaldas a los legisladores anticiparía un conflicto que no termina de resolverse.

Los participantes denuncian mucha más quienes no vinieron que quienes estaban, un príncipe, un presidente, Zelensky, golpeado por la guerra, los hermanos uruguayos y chilenos y después poco más, delegaciones pobres e insoladas.

Pero su contenido marcó una línea argumental que ponía a la Argentina ante un desafío suplementario. A las crisis existentes, Javier Milei le adicionaba muchos conflictos. Israel, Ucrania, Brasil, Colombia, etc.

La política exterior es la más importante para cualquier nación, sobre todo una de cierto tamaño como la nuestra. Manejarla de manera poco profesional, cambiando objetivos históricos que han posicionado a nuestro país ante el mundo, tiene costos muy elevados.

Costos que no son abstractos, sino concretos. La demora de entrega del GNL en mayo por la falta de seguridad en el pago es una clara muestra.

Las mentiras, como la expresada por Toto Caputo sobre la supuesta negociación por la deuda con el FMI, inmediatamente desmentida por las autoridades del FMI, retiran de la mesa de negociación el elemento central del diálogo, la confianza.

Otro de los anuncios importantes del Presidente ese 1º de marzo, fue el de la convocatoria a la firma del Pacto de Mayo con su decálogo. 10 mandamientos que se firmarían como un compromiso. Luego de muchas idas y vueltas se firmó en Julio y junto con él, se crea una Comisión para elaborar los contenidos.

Esta Comisión iba a ser conformada por actores del Gobierno. No lo dice explícitamente, pero así será. Participación CERO.

Todo genera falta de confianza, en política internacional, en política interior agrediendo a los gobernadores, en política social haciendo pagar el costo del ajuste a los menos favorecidos, las PyMEs que cierran de a miles.
La pérdida de confianza en un presidente que pasa más tiempo entre millonarios del mundo que gobernando y, últimamente, avanzando y retrocediendo sus medidas económicas, contradiciendo las promesas electorales y haciendo sufrir al pueblo las consecuencias de sus propias decisiones.
Milei tiene dos sectores asociados, AEA, Asociación de Empresarios Argentinos con Techint a la cabeza y el mundo de las finanzas. Ambos están viendo las fallas de un modelo que solo existe en publicaciones periféricas. Donde se aplicaron, aun parcialmente, estas ideas fracasaron, y como dije en otro artículo, si en Gran Bretaña echaron a Liz Trout en 44 días cuando propuso estas mismas ideas, ¿Qué nos hace creer que aquí debe durar tanto más?
El ajuste dura lo que resisten los ajustados y la pregunta inevitable es: ¿Por qué hay que sufrir?
El Pacto de Mayo es falso en sus fechas, en sus palabras, porque no fue un pacto y en sus objetivos, porque apenas salidos de la Casa Histórica, los Gobernadores comenzaron a maniobrar para no quedar demasiado implicados en víla nube de la desconfianza que Javier Gerardo Milei despierta entre extraños e, increíblemente, propios.

Autor
Félix González Bonorino

Continue Reading

OPINIÓN

«La juventud y su acercamiento a los textos de Perón», por Carlos Benítez

Published

on

En una conversación con Vivian Elem y Rodolfo Colángelo, el titular de la Editorial Punto de Encuentro, Carlos Benítez, habló sobre la colección «Cabecitas Negras», que incluye textos de Perón, Evita y otros referentes del peronismo. Benítez señaló que algunos textos de Perón pueden resultar complejos para los jóvenes, pero destacó su vigencia y la relevancia de la tercera posición y de las tres banderas del peronismo, ideas que los jóvenes pueden hacer suyas hoy.

#enquenosparecemos | Sábados de 13 a 15hs

Continue Reading

Tendencias