OPINIÓN

La GRIETA ES VISCERAL por Emilio Augusto Raffo

Published

on

En estos últimos tiempos, fogoneada por cierto, ha aparecido una palabra: “ODIO”.

Lo vimos durante la imprevista pandemia, que aunque resulte obvio recordarlo aún por su propio nombre, asoló a todo el planeta, no distinguió ni sectores, ni ideologías, territorios etc. Aunque muchos sostuvieron que nuestro país debió soportar por imprevisión de los gobernantes de cualquier sector, ya sea nacionales, provinciales y municipales.

Luego de más de 100 días de aislamiento social preventivo y obligatorio, fatigados por cierto por ese esfuerzo, salieron muchos a combatir esa disposición del Estado Nacional, Provincial y Municipal con pié en la “libertad” con manifestaciones hostiles por cierto, fundadas en la “libertad de expresión” ( yo se me cuidar solito!),
Hace pocos días, un sector del gobierno republicano según sostiene nuestra Constitución Nacional, desde un edificio gubernamental con pié en esa mentada libertad de expresión (la cual todos debemos garantizar) salieron a re instalar un tema que ahora pretenden denominar “memoria completa”, reivindicando de hecho, no solo a los que debieron padecer por cierto los violentos desencuentros del pasado, sino que, elípticamente, propician reivindicar el terrorismo de Estado que se escudara en aquellos hechos, con la sola intención de exterminar al adversario político (termino que hoy desde algunos sectores en plena competencia electoral incorporan como tema esencial a fin de captar votos )
Las actitudes y manifestaciones llevan, lamentablemente, una palabra abarcativa de ese sentir: “ODIO”, aunque eufemísticamente la denominemos “grieta”
Digamos, también lamentablemente, que ese odio es visceral, no es de ahora ni del pasado reciente, no se reduce a peronismo y anti peronismo aunque ello hubiese recrudecido.
No sólo se vio en las gestas independentistas, incluso en los propios hechos que dieron lugar a la Revolución de Mayo, Mariano Moreno debió padecer por cierto los embates a su propio Plan de Operaciones – se dice redactado en conjunto con Manuel Belgrano-, sino en la propia gesta Independentista.
Los odiadores de siempre, no podían admitir (con Sarratea a la cabeza) que Gervasio Artigas (traidor, bárbaro y sedicioso) tuviese la malhadada idea de dar el Primer Grito Independentista, en Entre Ríos el 29 de junio de 1815, hecho pasado por alto, por nuestra “Historia Oficial”. (si es necesario “ mentir a la posteridad se miente” le decía Salvador María del Carril en una carta en donde lo animaba a Juan Lavalle para que procediera asesinar a Manuel Dorrego y agregaba; “la espada es un instrumento de persuasión muy enérgico prescindamos del corazón en este caso…”
Cuando Domingo F. Sarmiento debía graficar la personalidad de los Caudillos Federales, personificados en Facundo Quiroga, lo definía como un bárbaro primitivo, y a renglón seguido en carta a Bartolomé Mitre lo arengaba : “..no trate de economizar sangre de gaucho. Este es un abono que es necesario…”.
El mismo criterio que adoptara el “civilizador” Julio A. Roca, en su Campaña del Desierto en 1880
La asunción de la clase media al poder, con la Presidencia de Yrigoyen, fue un golpe que recrudeció ese odio visceral. “Cesar Mestizo”, “Mazorquero de arrabal”, por decir lo menos, el mismo día de su derrocamiento, esas mismas hordas de clase media y clase media alta que pululan hoy en las plazas en reclamo de libertad, destrozaron su domicilio particular del Barrio de San Telmo y procedieron a encarcelarlo, primero en La Plata y luego en la isla de Martin García. Incluso llegaron a sacar la placa que recordaba aquel triste paso por el Regimiento 7 de Infantería de La Plata, como una suerte de una nueva vandalización. (2016)
Así se mantuvieron durante años hasta la asunción de Juan Perón en 1946, desde la Unión Cívica Radical, y el Partido Demócrata se lo definía como el “aluvión zoológico”, obviamente eran la “barbarie”.
Lo sucedido a partir de entonces no tenia, hasta ahora, parangón en la historia.
Ese odio visceral se puso de manifiesto, hasta límites inconmensurables en la figura de Eva Perón, desde desacreditarla por sus orígenes humildes (no se sabe si terminó el sexto grado en la Escuela Numero 1 Catalina Larrati de Estrugamou de Junín), adjudicándole cuanto hecho se les ocurriera y terminando con aquella frase elocuente y bárbara por cierto: “ Viva el Cáncer” (el odio de los civilizados e ilustrados)
Todos esos esfuerzos no sirvieron para desacreditar y menguar el amor de las fabriqueras del Gran Buenos Aires y de los trabajadores y trabajadoras de todo el país que se veían reflejadas en aquella mujer que, poco a poco, se transformó en Abanderada de los más Humildes y ejemplo mundial de lucha en defensa de los más desposeídos.
No contentos con esto secuestraron y ocultaron su cuerpo durante más de 20 años, sometiéndolo a los más aberrantes ultrajes.
No escatimaron esfuerzos para poner de manifiesto su odio y procurando vencer al pueblo.
En horas del mediodía y en un día laboral de junio de 1955 bombardearon la Plaza Mayo asesinando a víctimas inocentes, mezclando todo con todo, los aviones de la aeronáutica y de la marina de Guerra llevaban la inscripción “Cristo Vence” (que bautismo de fuego para nuestra aviación..¡) y tres meses después, derrocaban al Gobierno Constitucional.
Ya tenían en claro que había que profundizar la grieta entre los argentinos, ya les había dado frutos en el pasado, no bastaba derrocar “al Tirano”, se decretó prohibir usar el nombre Juan Perón o de Eva Perón, sus derivados, los emblemas partidarios y mediante un Bando Militar derogaron la Constitución de 1949
Mantuvieron esa proscripción de Perón y del peronismo durante 18 años
Persiguieron , encarcelaron y fusilaron a cuanto partidario del “régimen depuesto” les pasara cerca, y no sólo en 1956, (no me canso de recodar al emblemática cara del general Valle a sus asesinos Rojas y Aramburu a horas de su muerte (”Entre mi suerte y la de ustedes me quedo con la mía. Mi esposa y mi hija, a través de sus lágrimas verán en mí un idealista sacrificado por la causa del pueblo. Las mujeres de ustedes, hasta ellas, verán asomárseles por los ojos sus almas de asesinos. Y si les sonríen y los besan será para disimular el terror que les causan. Aunque vivan cien años sus víctimas les seguirán a cualquier rincón del mundo donde pretendan esconderse. Vivirán ustedes, sus mujeres y sus hijos, bajo el terror constante de ser asesinados. Porque ningún derecho, ni natural ni divino, justificará jamás tantas ejecuciones.”)
Continuando ese plan de negacionismo anularon las elecciones de la Provincia de Buenos Aires en 1962 luego de advertir que la prueba de ensayo, de consentir la candidatura de Andrés Framini, les resultó un fracaso, proscribieron al peronismo en las elecciones de 1963 dando lugar a la asunción de un gobierno minoritario, prohibieron durante el gobierno de la Unión Cívica radical del Pueblo regresar a Perón en 1964 y hasta llegaron a hacer una reforma constitucional para proscribirlo en las elecciones de 1973, ¡!!! (cuyo ideólogo era ni más ni menos que Arturo Mor Roig, ex presidente de la Cámara de Diputados en épocas de Arturo Illia y participe impávido en los fusilamientos del 22 de agosto de 1972 en Trelew).
En 1976 derrocaron al Gobierno Constitucional y, por las dudas, encarcelaron a la ex Presidenta María Estela Martínez de Perón, durante más de seis años, con argumentaciones meramente aparentes y sometiéndola al mayor escarnio posible,
El año 1976 fue el inicio de la mayor represión y cercenamiento de derechos de los que se tenga memoria, más de 30.000 muertos y desaparecidos, torturas apropiación de bebes y bienes.
Poner el país en pie de guerra en dos oportunidades (una de ellas consumada y que trajo como corolario el mayor retroceso en los reclamos de nuestros derechos sobre Islas Malvinas) y un periodo de entrega de nuestros recursos jamás visto.
La asunción de Raúl Alfonsín fue una de bocanada de aire fresco, la decisión de someter a un juicio, con todas las garantías constitucionales, a parte de los responsables del genocidio así lo demuestra.
Pagó un precio muy alto por ese accionar, asonadas militares, un golpe económico y financiero por intereses que hoy recocemos como fondos buitres así lo testifican.

Acorralado pero con temperamento propició las leyes de obediencia debida y punto final, y con el mismo temple apoyo la derogación de esas mismas normas a partir del 2003
La crisis política e institucional de 2001, solo tuvo un atisbo cuando esa misma clase media porteña vio alterada la disposición de sus ahorros, pero nada dijeron cuando la “civilización” asesinó a civiles indefensos.
El 2003 nos puso frente a la posibilidad de una segunda vuelta electoral conforme la Constitución reformada en 1994 asumiendo, en definitiva, el segundo – Néstor Kirchner) por deserción del primero (Carlos Menem).
Digamos que históricamente no fue la primera vez, en 1973 la fórmula de Héctor Campora y Vicente Solano Lima no había alcanzado el 50% mas 1 de los votos en aquel histórico 11 de marzo de 1973 (elecciones en las que Perón había sido proscripto), pero una razonable decisión histórica de Ricardo Balbín, tornó innecesaria la segunda vuelta que estaba prevista en dichas votaciones. Digamos también que esa elecciones fueron urdidas al amparo de un posible fraude electoral y que el resultado obtenido por la tercera fuerza no permitió la consumación de esa artera maquinación.
Expongamos que los sectores opositores comenzaron su campaña anti gobierno el mismo 25 de mayo de 2003, como lo hicieran el 4 de junio de 1946 y en mayo pero de 1973.
Ya ahora con más experiencia tomaron cuando medio de comunicación tuvieron a su alcance, lo usaron con ese ideario en 2008 con la llamada “crisis del campo” y en cuanta oportunidad les vino en gana, incluso en febrero de 2015, cuando produjeron el llamado “Golpe Blando” aprovechándose, sin hipocresías, de la muerte del Fiscal Alberto Nisman y en todo ese proceso electoral endilgando delitos inexistentes y con operaciones mediáticas que ni a Goebbels se le hubiese ocurrido, ni aún en sus sueños de enfermiza fantasía.
Ocho años después advertimos que gran parte de lo dicho era absolutamente mentira. Sólo un grupo de fanáticos se encierran en esa dislatada posición.
Hoy, como a la largo de nuestra historia, parte de la población y su dirigencia es odiada profundizando una grieta (definida así por los mismos que la provocan como una forma de dejar bien en claro de qué lado se está)
Defienden lo indefendible pero tienen cobertura mediática que sobra y el Estado, desconozco si por razones de mérito, oportunidad o conveniencia, no puede o no atina a comunicar debidamente.
En estos días, como decía al principio, se vuelve a batir el parche pugnando entre dos sectores reaccionarios la paternidad de la reivindicación de la violación de los derechos humanos y advertimos que dicho tema no habría sido incorporado en el temario del Obligatorio Debate Presidencial.
Debo admitir que no atino a señalar su conveniencia o no de incorporarlo en dicho temario por las consecuencias que podría acarrear a este proceso democrático máxime que desde uno de los sectores en pugna hasta se verían beneficiados al poder agregar abiertamente abriendo viejas heridas, aun cuando muchas se mantienen en virtud de la subsistencia de los delitos de acción continuada como lo son la ilegitima apropiación de bebes.
Pero es lo cierto que dicha grieta se transforma en un odio visceral de un lado y dl otro se propicia la unidad y entendimiento nacional, aun con disensos
En 1955 escribieron y publicaron un libro con fondos del estado, “El Libro Negro de la Segunda Tiranía”, dejando en claro, obviamente, que la primera era la de Juan Manuel de Rosas .
No es esta la primera vez que ocurre en nuestra historia.
No nos puede asombrar su odio inconmensurable, – también pregonaron hace muy poco el “Viva el Cáncer”- no ahorraron calificativos para denostar a mujeres y hombres a lo largo de nuestra historia, lo vimos con Rosas, Yrigoyen y Perón, digamos que a una de ellas el pueblo la llamó, simplemente, Evita y hasta hoy siguen combatiéndola.

EMILIO AUGUSTO RAFFO

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Tendencias

Copyright © 2022