Si algo caracteriza al mundo contemporáneo es la Batalla Cultural permanente que atraviesa a las sociedades. Podemos decir que es el triunfo contemporáneo de Gramsci, pero también todo ello regulado en un nivel superior por el «Divide et Impera» romano, la estrategia más antigua y efectiva de dominación.
Los polos ideológicos, tanto la izquierda y el progresismo radical (feminismo extremo, ideología de género, ecologismo fundamentalista, indigenismo radicalizado, entre otros) como la derecha ultraliberal capitalista (mercado como única ley ordenadora de la economía, anarcocapitalismo, desregulación absoluta, Ultraliberalismo, etc) han convertido el escenario político en un campo de guerra cultural donde cada sector social da su Batalla Cultural en pos de lograr la Hegemonía que es la meta final. En otra palabras plantean desde sus visiones fundamentalistas una Batalla Cultural sectorial para operar políticamente en pos de su Modelo de la Sociedad Ideal buscado o anhelado por ese sector.
Sin embargo, detrás de estas disputas muchas veces feroces, detrás de los enfrentamientos mediáticos agresivos e intolerantes con la opinión del otro, de la radicalización de posturas que dividen a la sociedad de estos pueblos, se esconde el brazo invisible de una élite supranacional que fomenta, financia y promueve esta fragmentación ya que los pueblos divididos son más fáciles de controlar.
Esta metodología de fragmentación fue aplicada sistemáticamente en estos últimos 50 años por las Elites de Poder durante todo el periodo de la Globalización Neoliberal.
GRAMSCI Y LA HEGEMONÍA CULTURAL COMO MÉTODO OPERATIVO FRAGMENTACION
Antonio Gramsci, pensador marxista italiano y militante del Partido Comunista, fue uno de los más grandes dilucidadores del papel que cumplen la superestructura ideológica y cultural como herramienta de dominación y control de la sociedad.
Su planteo era claro: la dominación no se ejerce solo por la fuerza, sino a través de la cultura, la educación, los medios de comunicación y la moral impuesta.
La hegemonía cultural se logra cuando un grupo impone su visión del mundo como «la verdad incuestionable», anulando toda la oposición a la misma y criminalizando el disenso. Es la nueva inquisición ideológica: quien no se alinea con el pensamiento hegemónico es señalado, censurado y castigado.
A partir de esta base conceptual es que se establece una Batalla Cultural para lograr la imposición de esa Hegemonía ideológica y cultural de un sector social o grupo sobre el resto de la sociedad.
Cuando esta visión ideológica se convierte en una Verdad Única Incuestionable, en una Religión Social Fundamentalista, todos aquellos que no la compartan o aun que la cuestionen con legitimidad democrática automáticamente se convierten no en adversarios sino en enemigos ideológico-culturales que deben ser heretizados por su pensamiento, combatidos y derrotados. Comparando o haciendo una analogía un poco con el pasado esta es la dinámica operativa amigo-enemigo utilizada tanto por las fuerzas insurgentes de izquierda como por las fuerzas represivas de derecha en los 70 con el funesto resultado final.
Este mecanismo no es exclusivo de la izquierda o la derecha; ambos extremos lo utilizan como herramienta de poder. La sociedad está reducida a bandos irreconciliables, enfrentados por conflictos muchas veces fabricados que en algunos casos esto es hecho sobre necesidades legitimas existentes en la sociedad, pero mientras se genera esta polarización irreconciliable de sectores internos sobre contradicciones secundarias en el seno de la sociedad las élites continúan operando cómodamente en las sombras, manteniendo el control.
Esta lucha o Batalla Cultural mal manejada que genera enfrentamientos irreconciliables es doblemente beneficiosa para la Elite de Poder Global Neoliberal:
• Por un lado esa división y fragmentación de la sociedad la hace más fácilmente manipulable y controlable y dominable ya que impide que se forme un gran núcleo o movimiento con la masa crítica política suficiente para enfrentarla.
• Por otro lado todas estas Batallas en función de contradicciones secundarias o diferencias internas en una sociedad nunca atacan la base del poder real de la Dependencia Colonial por lo que las Elites de Poder pueden seguir tranquilas, gracias estos “distractivos politicos”, con su accion de expoliación.
Lo Conceptual Operativo junto con pautas de Ingeniería Social también suelen ser funcionales a generar estos enfrentamientos internos.
• El principio que “lo emocional moviliza y el odio es una de las mayores emociones por lo que moviliza mucho más” de Steve Bannon busca esas contradicciones internas de la sociedad para utilizarlas como herramienta secesionista.
• Por otra parte operativamente (Ventana de Oberton) las vanguardias de estas Religiones Sociales Contemporáneas Fundamentalistas tratan de imponer desde el inicio ideas extremas actuando en forma violenta e intolerantes por el pensamiento de los demás, tratan de imponer su Verdad Revelada al resto de la sociedad y cual Inquisición Moderna heretizar a todos aquellos que osan disentir o se trata de imponer el silencio de pensamientos alternativos en la sociedad basados en el miedo a disentir, son en los hechos movimientos politicos que quieren imponer una Cultura Totalitaria del Pensamiento.
Esta particularidad operativa inevitablemente generara un reacción confrontativa en los sectores de la sociedad que no compartan esta Verdad Revelada y se nieguen a ser sometidos a ella por lo que inevitablemente los choques y divisiones en la sociedad serán inevitables.
Por esta razón como decíamos al principio el triunfo contemporáneo de Gramsci se debe a que tanto la izquierda cultural o movimientos contemporáneos progresistas (Ideología de Genero, Ecologismo, Movimiento LGTBQ, Indigenismo, etc.) como la derecha ultraliberal capitalista (Mercado único ente regulador, Libertinaje Civil, Ultra Liberalismo, Anarcocapitalismo, etc.) luchan por lograr la Hegemonía Cultural, lo cual es democráticamente legítimo.
Pero lamentablemente cuando estos movimientos o corrientes de pensamiento se convierten operativamente en fundamentalistas ideológicos que utilizan una Intolerante Ideológica Intolerante como metodología de accion política para dar la Batalla Cultural para reclamar por necesidades (reales o creadas) insatisfechas, esto inevitablemente terminara generando carencia de empatía y enfrentamiento con otros sectores en el seno de la sociedad ya que a nadie le gusta el sometimiento y las imposiciones.
«DIVIDE ET IMPERA»: LA ESTRATEGIA DE LAS ÉLITES DE PODER
El ”Divide et Impera” es una Doctrina de Accion que lo que busca es vencer o mantener el poder mediante la ruptura de la gran masa crítica del enemigo en fracciones más pequeñas que tienen menos energía en su aislada individualidad.
El concepto se refiere operativamente a una estrategia que rompe las estructuras de poder existentes y evita la vinculación de los grupos de poder más pequeños.
Podría ser utilizada en todos los ámbitos en los que, para obtener un mejor resultado, es en primer lugar necesario o ventajoso romper o dividir lo que se opone y particularmente esto desde el punto de vista de las Elites de Poder Globales Colonialistas seria dividir o romper todo aquello que se opone al Poder Colonial de Dominación que en este caso sería un Pueblo sometido pero concientizado, organizado políticamente en pos de esa contradicción principal que Patria o Colonia, Liberación o Dependencia.
Históricamente esta fue la principal Doctrina Política Britanica en la conformación del Neocolonialismo durante el Siglo XIX y XX. La fragmentación de la america española fue su principal objetivo el cual logro. En Brasil esto no fue necesario ya que la subordinación a Imperio Británico y sus Elites Económicas era sólida.
Contemporáneamente durante la Globalización Neoliberal post-guerra fria llevada adelante por las Elites Globales de Poder sus objetivos eran y son entre otros la destrucción de los estados nación, que limitan su accionar dentro de los paises, para lograr la ansiada gobernanza global subordinada a sus intereses.
El objetivo es siempre el mismo: destruir la identidad nacional, fragmentar la sociedad en luchas internas irreconciliables y evitar la conformación de un bloque de resistencia unificado.
Durante la globalización neoliberal, esta táctica se aplicó con una precisión quirúrgica:
Desmantelamiento de los Estados-nación para que las multinacionales operen sin restricciones.
Subordinación a organismos supranacionales (OMC, FMI, Banco Mundial) que imponen reglas económicas ajenas a los intereses nacionales.
Financiamiento de ONGs «progresistas» y think tanks neoliberales, que se presentan como altruistas pero que operan como herramientas de control ideológico o subvencionantes de acciones políticas.
En este sentido, estas Elites llevaron adelante acciones subvencionadas por ONGs y apuntalas por entes u organismo internacionales que operativamente su misión era generar controversias internas sobre contradicciones secundarias existentes en toda comunidad plural y utilizar esta mecánica para fragmentarla en bloques diferentes que se enfrenten entre sí.
La Batalla Cultural que llevan adelante tanto la Izquierda y movimientos del Progresismo como asi también nucleamiento de la Derecha Ultraliberal cuando esta se convierte a Ideologías Fundamentalistas objetivamente terminan siendo funcionales operativamente en terreno y subordinadas estratégicamente a la Doctrina Política principal de las Elites de Poder Globales que es el Divide et Impera que se halla en un nivel geopolítico de una jerarquía superior.
Algunos de los principales financiadores de la Batalla Cultural o brazos operativo que podemos citar son:
George Soros a través de su Open Society Foundation (u$s 38.000 millones en los últimos cuarenta años dirigidas a Revoluciones de Color, Sociedades Abiertas, Ideología de Genero, Ecologismo Fundamentalista, etc.)
Fundación Rockefeller, Fundación Ford (control de la natalidad y del crecimiento demográfico, utilización del políticas ambientalistas como morigerador del desarrollo de paises subdesarrollados, etc.)
Sociedad Mont Pelerin y Red Atlas: Financiados hermanos Koch, multinacionales y organismos del imperio. La función ha sido la difusión y apuntalamiento económico del Neoliberalismo extremo de Milton Friedman, Frederic Von Hayek en el mundo. En argentina lo hicieron con Mauricio Macri (Fundación Pensar), la Fundación Libertad y con Javier Milei.
PENSAMIENTO NACIONAL Y BATALLA CULTURAL
El Pensamiento Nacional triunfara en la Batalla Cultural cuando tengamos conciencia clara que existen en toda Comunidad contradicciones principales (Cuestiones Importantes Comunes) y contradicciones secundarias (Desavenencias Internas Legitimas).
Siendo que en los hechos Argentina sigue siendo un país colonial presa del Imperialismo Contemporáneo Anglosajon (si lo es en manos del estado nación imperial o de sus Elites de Poder Económicas en los hechos da igual) por lo tanto dentro de las Contradicciones Principales podemos claramente poner que Patria o Colonia, Liberación o Dependencia son la contradicción principal, por lo tanto los principios rectores unificadores que vallan en contra de la dependencia y en favor de una nación emancipada que busca la Felicidad del Pueblo y la Grandeza de la nación deberían ser guías en el accionar político común de toda la sociedad.
En ese sentido por ejemplo las banderas de lucha como la Soberanía Política, la Independencia Económica, la Justicia Social, la Democracia y el Crecimiento Inclusivo van en ese sentido y son bandera unificadoras de lucha.
Respecto a las contradicciones secundarias (Diferencias o Desavenencias Internas Legitimas) existentes en el seno de la sociedad las mismas, respetables en toda sociedad democrática, deberían ser abordadas de forma que esa confrontación legitima de ideas o reclamos por reivindicación de derechos se resuelva de una manera que no genere divisiones ni enfrentamientos irreconciliables internos dentro de la sociedad que atenten contra la unidad que debe haber en pos de resolver las contradicciones principales siendo estas en los hechos las Cuestiones Principales Existenciales Comunes a toda la sociedad.
Esto no implica en absoluto que hallan incompatibilidades entre las Contradicciones Primaria y la Secundaria o que sean mutuamente excluyentes los derechos de las mayorías con los derechos de las minorías o que deban ser dejadas de lado o suspendidos en el tiempo, pero sí que hay o debería haber una jerarquización en su valorización política operativa, principalmente por aquello que decía el Martin Fierro:
«Los hermanos sean unidos, porque esa es la ley primera;
tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea,
porque si entre ellos pelean, los devoran los de afuera.»
EL PENSAMIENTO NACIONAL COMO ÚNICA VÍA DE EMANCIPACIÓN Y CONQUISTA DE DERECHOS
Para romper con esta trampa y reconstruir la nación, es fundamental diferenciar entre contradicciones primarias y secundarias.
🔹 Las contradicciones primarias son aquellas que definen el destino de un país: Patria o Colonia, Liberación o Dependencia . Es ahí donde debe centrarse la lucha principal, porque de ello depende la supervivencia misma de la nación y todo su pueblo.
🔹 Las contradicciones secundarias son diferencias internas de carácter político, económico, cultural, identitario o sectorial deben resolverse sin fragmentar la unidad del pueblo , porque cuando una sociedad pierde su cohesión, queda a merced del enemigo externo.
Argentina es un país colonial , sometido a los intereses del poder anglosajón, ya sea en su versión globalista neoliberal o en su versión supremacista imperialista.
Frente a esto, el pensamiento nacional debe retomar sus banderas emancipadoras históricas de Soberanía Política, Independencia Económica y Justicia Social, Democracia y Libertad, Crecimiento Económico Inclusivo como ejes de reorganización del campo popular.
No es cuestión de negar derechos ni de eliminar diferencias, sino de priorizar la unidad en torno a los intereses comunes.
El divide y vencerás ha sido la mayor arma del colonialismo en nuestra historia. Comprenderlo y desactivarlo es la única manera de evitar que la Argentina termine siendo un territorio de saqueo por oligarquías nativas cipayas y fuerzas extranjeras, mientras su pueblo sigue siendo el eterno condenado de esta tierra.
El Pensamiento Nacional triunfara cuando internalicemos que todos somos parte de una Comunidad (Unidad Común de Necesidades y Objetivos) que en su pluralidad constitutiva debe, con un nivel importante de tolerancia por las diferencias internas, buscar la unidad de accion política en función los denominadores comunes de la sociedad sin menoscabar la lucha por necesidades insatisfechas o derechos insuficientes de sectores internos.
Ariel Rolfo