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OPINIÓN

«Socialismo y Libertad», por Mario Mazzitelli

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La oligarquía parasita tiene muy claro sus intereses, por los que son capaces de cualquier exceso. Sí, incluso negar la vida y la dignidad de las personas, cuando ponen en riesgo sus privilegios.

Los que expresan “cárcel o balas” a quienes piden por un derecho, un aumento salarial o mejores condiciones laborales; muestran la magnitud de la servidumbre intelectual y política puesta a su servicio.

Si llegan a estos extremos con las personas de carne y hueso; que no harían en el mundo de las ideas. La necesidad de fundar una afirmación en pruebas, ha sido relevada para sus servidores. En términos generales lo que van buscando es el monopolio de la palabra. Propaganda basura multiplicada por el sistema mediático que dominan.

De esta manera no solo explican las bondades del régimen que cobija sus privilegios. También dicen “que es el socialismo”, “que ha hecho el socialismo” y “qué posibilidades tiene de mejorar la sociedad actual”. Así su más apañado y promocionado vocero ha definido: «El socialismo es una enfermedad del alma», dice que: «El socialismo va a fallar siempre» y acusa: “El socialismo deriva en totalitarismo y por ello mataron 150 millones de personas”. Más otro montón de imbecilidades, que de tanto ser repetidas se vuelven realidad en la subjetividad de muchas personas.

No es mi pretensión responder a tanta pavada en una pequeña nota de ocasión.

Sí diría que deberían tener un mínimo de honestidad intelectual, de la que carecen por completo.

Como nadie puede dar cuenta de lo que ocurrió en el mundo durante siglos, es lógico que al definir “que es el socialismo, su práctica pasada y sus posibilidades futuras” nos restrinjamos al ámbito de nuestro país. Aquí sí podemos decir que el término tiene dos puntos culminantes, en 1837 con Esteban Echeverría y su “Dogma Socialista” y en 1896 con Juan B. Justo y la fundación del Partido Socialista.

Por este camino podemos encontrar buenas referencias para iniciar el debate.

Entonces observemos lo que dijeron algunos socialistas argentinos con autoridad moral, política e intelectual.
Por ejemplo:

Esteban Echeverría dirá que “La Democracia es el régimen de la Libertad, fundado en la Igualdad de clases”.

Alfredo Palacios, para quien “El socialismo es, primordialmente, una aspiración ideal hacia un orden jurídico más justo, que reemplazará al capitalismo, mediante condiciones económicas, pero sobre la base de postulados éticos. Reclama una honda transformación orientada por la idea de libertad y de justicia, valores absolutos superiores a todo valor económico…”

O Mario Bunge: “Yo sostengo que hay motivos prácticos y morales para preferir el socialismo auténtico al capitalismo, y que la construcción del socialismo no requiere la restricción de la democracia sino, muy por el contrario, su ampliación, del terreno político a todos los demás. Esto es lo que llamo democracia integral: ambiental, biológica, económica, cultural y política. Semejante sociedad seria inclusiva: no habría exclusiones por sexo ni por raza, ni explotación económica, ni cultura exclusivista, ni opresión política.”

Podríamos seguir. Como vemos el socialismo no es una enfermedad. Es la combinación de una mirada crítica sobre el capitalismo, al tiempo que creativa, dando por hecho que el ser humano es capaz de cambiar la realidad en pos de algo superior.

El socialismo tiene la obligación de ser una propuesta superadora del capitalismo, atractiva y deseable. No existe el socialismo en abstracto, con una fórmula matemática, para todo tiempo y lugar. Esa es simplemente una tergiversación política, inducida por la oligarquía parásita que se atribuye la facultad de silenciar la palabra de los socialistas, para hacernos decir lo que nosotros nunca sostuvimos.

Tampoco es cierto que hayamos asesinado a 150 millones de personas. Que yo sepa desde 1837 a la fecha a los socialistas no se nos atribuye un solo crimen. Nadie escuchó que Juan B. Justo, Alicia Moreau, José Ingenieros, Mario Bravo, etc. hayan sido acusados de ningún asesinato.

Mentiras escabrosas como decir que somos hijos del totalitarismo. La gran consigna socialista fue: “No hay Pan sin Libertad, ni Libertad sin Pan”.

Lo que causa horror a la oligarquía es que la Libertad no se circunscriba a los dueños del gran capital, a los propietarios de la tierra, los medios de producción o el dinero. Extender la Libertad a los sectores postergados y explotados, empobrecidos y marginados; a esa Libertad le tenían y le tienen miedo. Por eso se apropian de la palabra. Y la difunden y multiplican por todos los medios que tienen bajo su “propiedad privada”. Una manera de privar de voz a los socialistas.

No hay Libertad, sin Igualdad ni Fraternidad. Ese dilema ya fue resuelto hace más de 200 años. Por eso nuestro himno al grito de Libertad le suma “Ved el trono a la noble Igualdad”. No se trata de una igualdad absoluta, como algunos pretenden para ridiculizar la idea. Se trata de un piso de igualdad desde el cual poder desplegar toda la potencialidad creadora de cada uno. Cuando ese piso de igualdad es perforado por el hundimiento social bajo la línea de pobreza, o peor aún de indigencia, la Libertad desaparece para ese sector de la sociedad. La necesidad extrema mata a la Libertad. Además, como la condición de la Libertad es su universalidad “Todos somos libres o no hay Libertad”. Podemos afirmar que el capitalismo colonial implantado en Argentina por la oligarquía parasita es la causa de falta de Libertad para las grandes mayorías populares.

Pero la vocinglería oligárquica no ceja en su intento por cerrar los caminos del socialismo. No solo hace cualquier tipo de alianza, interior o exterior, para impedir el desarrollo del socialismo en Argentina, no solo miente a raudales, no solo trata de desalojar el principio de Justicia que anida en todo ser humano; también trata de inducir a pensar que los ideales socialistas, en el mejor de los casos, son “utópicos”. Que allí donde se aplicó una tecnología para realizarlo, el fracaso fue estrepitoso. Se trata de propaganda interesada.

Siendo el movimiento socialista relativamente joven, puede ser que hayan existido experiencias fracasadas. Cómo las hubo en todos los intentos tecnológicos por llevar un ideal a la práctica. De hecho todo lo que nos rodea, creado por el ser humano para mejorar las condiciones de existencia, antes fueron utopías. Y ninguna fue exitosa en el primer intento.

Lo que no pueden negar es que también hay enormes éxitos. Bastante simple: mientras la ideología neoliberal se sostiene en la exacerbación del egoísmo individualista, defendiendo solo “intereses privados” aunque vayan en detrimento de otras personas y el ambiente; el socialismo plantea el principio de asociación de mutuo y múltiple beneficio. Por eso defendemos la cooperación democrática y participativa en todos los niveles; político, social, económico, cultural y ambiental.

La idea de seres aislados, vinculados entre sí por el mercado, al que concurrirían solo para obtener beneficios individuales y del que emergería una mano invisible para armonizar los intereses de todos; es una construcción fantasiosa. Absurda y ya refutada; que merecería un capítulo aparte.

Los pueblos, que tienen una intuición inteligente, se han desvinculado de esa idea. En todos los países del mundo. Al punto que han respaldado el papel del Estado para que este cumpla tareas de cierta equidad, que no lleven a la sociedad a desequilibrios tan injustos que terminen en una violencia generalizada.

Los neoliberales vernáculos, al servicio de la oligarquía parásita, tienen una doble moral al respecto. Menoscaban el papel del Estado hasta pedir su achicamiento o extinción, por un lado; y por otro piden que sea el garante de los privilegios de la propiedad privada, reprimiendo o llegando al “Terrorismo de Estado” si fuera necesario, para que sus ventajas injustas no sean menoscabadas. Doble moral que queda en evidencia cuando se sacan fotos en Tucumán con los mayores detractores de la Libertad de la historia Argentina.

Dicen que los socialistas estamos en contra de la propiedad privada. No es así. La organización de una sociedad moderna es impensable sin la existencia de propiedad privada. Aquella que le es propia a cada individuo o familia para realizar en plenitud su existencia. Pero sí nos hacemos algunas preguntas ¿Cuánta propiedad privada le corresponde a cada miembro de una sociedad? La cantidad es importante. Si es escasa o nula, no alcanza para un buen vivir. Y si es desmedida puede resultar en una concentración de poder, ajeno a todo principio democrático. En particular si hablamos de la tierra, de monopolios naturales, oligopolios, etc. Por lo demás, respetamos la propiedad privada existente, al tiempo que querríamos sumar propiedad común o cooperativa, hasta donde la realidad lo permita. Vivimos una etapa compleja, donde una sola forma de propiedad no resuelve la totalidad de los asuntos a encarar. Tenemos la mente abierta.

Nuestra exigencia es abordar la realidad particular y concreta en un tiempo y lugar, desde los mejores valores de la humanidad, desde principios éticos. No somos sabios ni infalibles, por eso confiamos en el pueblo la realización de la tecnología económico-social-institucional con la que mejorar la calidad de vida. Planteamos una Democracia Participativa en la que el Poder se encuentre en manos de las mayorías. Con responsabilidad individual y colectiva. Asignando el deber de cada uno, conforme su capacidad; y otorgándole bienes y servicios a cada uno, según su necesidad.

El drama nacional pasa por el parasitismo. Empezando por la oligarquía económica. Asociada en distintas entidades “empresariales”. Hay que observar que esta clase privilegiada, poco a poco, retomó las riendas del poder, después de haberlo perdido en 1983. Eso les permitió ejecutar su política neoliberal: desguace del Estado, privatizaciones, especulación financiera, etc. con sus consecuencias lógicas: concentración de la riqueza en pocas manos y empobrecimiento de las mayorías. Agreguemos que el pueblo al confiar en sus representantes, olvidó que en el mismo instante en que se sientan en los confortables sillones de la representación, adquieren parte de los vicios de los sectores del privilegio. Sea en la política, la Justicia, las asociaciones gremiales, empresariales, la burocracia estatal, etc.

El socialismo plantea al trabajo como la fuente fundante de la sociedad. Por eso nuestro corazón está junto al pueblo trabajador. Por eso seguimos sosteniendo que la tierra y el trabajo son el origen de la riqueza. Por eso para volver a poner las cosas en orden hay que combinar dos acciones: terminar con el parasitismo y enaltecer el trabajo.

Desde lo político el socialismo es una construcción democrática, colectiva y participativa. Los de arriba tienen intereses fundados en que no prospere. Para eso van conformando una plutocracia, con todas las herramientas disponibles: ideología, propaganda, consumismo, vicios, etc. Los de abajo, en cambio, deberían tener predisposición para su avance. Para eso deben concurrir varios factores. Liberarse de las falsas ideas transmitidas desde el régimen, asumir con claridad la defensa de sus propios intereses y manifestar, con voluntad, la intención de “retomar la senda democrática” en todos los órdenes. Para que la Democracia argentina resulte en un gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.

Sí, el Socialismo es la defensa irrestricta de la Dignidad Humana. Su método la Democracia y su finalidad la Libertad Creadora fundada en el Trabajo.

Por eso decimos que: mientras el capitalismo crea la ilusión de la libertad para pocos, el Socialismo es la Libertad para todos. Socialismo es Libertad.

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OPINIÓN

La Geografía: Capaz de explicitar los cambios climáticos como el devenir político por Ezequiel Beer

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Las severas advertencias publicitadas por el amplio arco científico durante las ultimas cuatro décadas en relación al ritmo de crecimiento, su expansión espacial, su nivel de acumulación monetaria y de sus efectos directos sobre el Medio Ambiente a vistas en el tiempo ya no son solo un pronostico sino una dura realidad cotidiana.
La disminución de la capa de ozono producto de la emisión masiva de gases contaminantes a la atmosfera también han dado origen al actual Cambio Climático que en estas semanas golpea de lleno la Argentina con un nivel récord de sequias y de altas temperaturas que pueden poner en peligro las previsiones de crecimiento económico para el año 2023 lo que auguraría que el país pueda llegar a entrar en una recesión.
Señalamos a la Geografía como una ciencia síntesis que puede interpolar variables físico/naturales con otras del tipo humano y de su plasmación territorial o regional es decir, comprender la relación entre un fenómeno climático con un proceso económico algo que la diferencia en su totalidad de otras ciencias.
Los acontecimientos del Cambio Climático exacerban otros procesos naturales como La Niña o El Niño que dan explicación a la situación atmosférica reinante en el país durante el mes de marzo del corriente año y que pueden tener una repitencia mayor en el tiempo de persistir el ritmo de desarrollo actual y de sus mecanismos intrínsecos.
La casi imposibilidad de un giro rotundo en el sistema productivo mundial solo deja la posibilidad de aggionar sus mecanismos en procura de preservación terrestre como así también – fenómeno que de cierta manera se esta dando – la existencia de cambios en las formas de consumo de la población.
La utilización de energía no fosil es un avance pero aun el poder del petróleo y de sus derivados sustenta los circuitos productivos mundiales y de hecho su traslado político y financiero.
Un antiguo concepto – guardado bajo siete llaves luego de finalizada la Segunda Guerra Mundial – es el de la Geopolítica que ha entrado en un vigoroso desenvolvimiento a partir de los acontecimientos del año 2001, de la expansión estadounidense sobre Medio Oriente y ahora ante el conflicto ruso-ucraniano y de las consecuencias que ya todos conocemos.
También en el Cono Sur se ha producido una nueva situación geopolítica ante el esperado triunfo electoral de Lula en el año 2022 y de su estratégica incidencia en los procesos de integración regional entre Argentina y Brasil.
La presencia – casi casual – de Daniel Scioli como Embajador Argentino permito – a pesar del Ex Presidente Bolsonaro – una serie de sustantivos avances bilaterales que en el contexto electoral local del presente año podrían darle un lugar expectante en la grilla de candidatos pasibles de obtener la victoria presidencial.
Es decir la geopolítica regional podría enmarcar la profundización de un nuevo eje de desarrollo conjunto para que pueda luego irradiarse al resto de los países vecinos y como bloque interactuar en términos globales.
Nuestro Sur Continente se caracteriza por ser de las pocas regiones de paz del mundo y con una variedad tanto ambiental como cultural casi única.
El mundo que se avecina será aquel que pujara agresivamente por la ostensión de recursos naturales para su supervivencia vital por lo tanto se debe obrar en conjunto con todos los países para que los mismos puedan ser objeto de un consumo no solo responsable sino renovable.
Generar también una política nacional y regional de Defensa es otro de los desafíos venideros desde una posición defensiva.
La Geografía es la llave necesaria para comprender no solo la situación sino la evolución de un mundo en permanente transformación.

Ezequiel Beer
Geógrafo UBA
Analista Político

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OPINIÓN

LOS CAMINOS QUE CONDUCEN A LA VICTORIA 2023 por Jorge Rachid

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Desde que el Frente de Todos asumió en 2019, una estrategia de demolición comenzó por parte de los adversarios locales y de los enemigos externos, con el objetivo claro de dividir al Movimiento Nacional, separar las corrientes internas, en especial kirchnerismo de otras expresiones, con especial énfasis en el intento de destrucción de Cristina como eje y acumulación del conjunto.
Eso fue paulatinamente asociado al ataque sistemático la Gobierno Nacional y a cada una de sus iniciativas, lo cual se agudizó en el desarrollo de la Guerra Pandémica que asoló al mundo y fue enfrentada con éxito en la Argentina. Pero es claro que los enemigos no podían permitir ninguna victoria: quemaron barbijos en manifestaciones en plena cuarentena, atacaron las vacunas rusas y chinas, hicieron esotéricas especulaciones agitadas por los Medios dominantes como que el virus “no existía”, que las vacunas colocaban “chips” y desconocieron el drama promoviendo la no vacunación.
Querían sangre de argentinos tomados como rehenes de sus intenciones políticas destituyentes, sin importar los costos sociales, como lo hicieron durante los 4 años de entrega patrimonial, saqueo, fuga de capitales, toma de empresas para sus grupos económicos, exclusión social, destrucción de la industria nacional en especial Pymes, intentos de privatización de Aerolíneas, YPF, Banco Central, con acuerdos vergonzosos en el plano internacional como el de Foradori-Duccan con los ingleses, en una claudicación de soberanía en Malvinas, peor a los Acuerdos de Madrid del menemismo.
Entonces a que nos enfrentamos en éste año electoral es la pregunta y la respuesta es sencilla: a un enemigo externo con agentes locales dispuestos a consolidar el coloniaje institucional en nuestro país, con herramientas políticas supuestamente democráticas, como el PRO/UCR y Libertarios que no dudaron en tomar por asalto los poderes republicanos, en especial la Corte Suprema y el servicio de Justicia, como herramienta de persecución al peronismo y de consolidación de su sistema de intereses concentrados en el Círculo Rojo.
Es que el marco internacional ha dejado al descubierto un aislamiento de la ficción del hegemonismo unipolar de EEUU que en franca decadencia, que no sólo desata guerras en un intento de recuperar áreas euroasiáticas perdidas, sino que ante el giro del mundo hacia el multipolarismo, hace de América latina su bastión de defensa última, con apropiación de sus recursos naturales, bienes y servicios con anclaje institucional colonizado, con el concurso de la OTAN desde Malvinas como ariete en el Atlántico sur.
Sus herramientas de consolidación del coloniaje, son los organismos internacionales como el FMI, el Banco Mundial, ALADI, OMC, Tribunal de la Haya, más el pleno de Naciones Unidas que vota con 193 países proyectos viables al mundo encaminados a la paz, a la soberanía de los pueblos, a la terminación del colonialismo y al cuidado del ambiente, pero el Consejo de Seguridad veta sistemáticamente. Ese esquema de poder mundial de la pos guerra mundial, se está derrumbando, ya no existe más ante un nuevo orden que no sabemos cómo culminará, sólo rezaremos que no sea por confrontación atómica.
En ese mundo se encuentra el peronismo y Latinoamérica con una respuesta de paz y de cuidado del ambiente, ante la agresión de un capitalismo brutal e inhumano, que sólo sabe desplegar Fondos de Inversión Buitres arrasando soberanías y avasallando los pueblos.
En un escenario convulso se desarrolla un año electoral en nuestro país, con una compactación de poder contraria al movimiento nacional que nuclea desde riendas institucionales como la Corte corrupta y criminal asociada al Lawfare de diseño colonial, hasta los Medios que mienten, manipula, ocultan y tergiversan por ser parte de ese poder hegemónico, que sólo vela por sus intereses.
La victoria del enemigo fue desde siempre, hace más de 30 años de neoliberalismo explícito, la fragmentación del campo popular que logrado estallar en miles de expresiones que ningún liderazgo, como el de Cristina logra totalizar. La victoria del campo popular se consolida en la unidad, aún en andariveles separados pero de objetivos comunes, superando la cultura individualista y colocando los objetivos estratégicos sobre la mesa de los compromisos compartidos.
El sólo reconocimiento del poder de fuego del enemigo, debe dar paso a la máxima comprensión de la hora actual, en la cual debemos dar respuestas desde las necesidades del pueblo argentino, sus esperanzas y utopías que descansan en la cultura nacional que mantiene la identidad y la memoria, de un peronismo filosófico que logró sintetizar siglos de luchas emancipadoras.
Todos deberíamos saber ya a quien vamos a votar, por quien vamos a militar y esforzarnos en nuestro compromiso, a quienes depositaremos la esperanza de que luchen por una Patria justa, libre y soberana: ese compromiso es que en 2023 logremos erigir un Gobierno amigo, frente a un enemigo que persigue, mata, excluye y entrega la Patria.
Esa disyuntiva resuelve cualquier especulación o personalización de la política, es especial si se hace desde una institucionalización del Movimiento convocada por Cristina y todos los sectores de nuestro movimiento: CGT y ambas CTA, Movimientos sociales, curas villeros y opción, empresarios Pymes, organismos de DDHH, PJ, partidos aliados y agrupaciones políticas nacionales en un esfuerzo conjunto por conformar un Gobierno amigo de las necesidades y esperanzas del pueblo argentino.
Abandonar la agenda enemiga, dejar de contestar las provocaciones, elevar los sueños y emociones del pueblo con la alegría de un porvenir nacional que quiere ser arrebatado. Derrotar al odio sembrado con intención del caos, con propuesta programáticas estratégicas que marquen adónde vamos, los caminos a recorrer, las dificultades a enfrentar, los tiempos y espacios necesarios para plasmar una verdadera revolución nacional en paz, democrática y popular, que sólo puede consolidarse en la construcción de la Comunidad Organizada como poder popular constituyente con el conjunto de la Patria Matria Grande, que nos espera para reconstruir una Patria QUE NUNCA DEBIÓ DEJAR DE SER.
JORGE RACHID
PRIMERO LA PATRIA
www.lapatriaestaprimero.org
CABA, 16 de marzo de 2023
BIBLIOTECA
Horacio González: Restos Pampeanos Ed. Colihue
Tasat-Bomfim: Pensar América Ed. Universidad de 3 de febrero
Maximiliano Pedranzini compilador: El Pensamiento Nacional Ed Punto de Encuentro

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OPINIÓN

Las mochilas militantes se nutren de utopías por Jorge Rachid

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Los procesos dominantes culturales de las últimas décadas, han transformado la lucha política en el territorio de las racionalidades, sin otras motivaciones emocionales excepto la que despliegan los enemigos como el odio. Las emocionales son aquellas que movilizan el comportamiento humano, venciendo los miedos, superando los obstáculos, transformando la realidad, no acompañarla, que es sinónimo de apuntalar el sistema injusto, el mismo que debemos cambiar.
Jamás la invocaciones a la lucha que hicieron nuestros Padres Fundadores ante el pueblo, se apoyaban en certezas, ni explicaciones de los escenarios que se construirían en la épica de la Liberación Nacional, se llamaba a la lucha por valores, acompañada por cientos de miles de paisanos criollos, mulatos, zambos, negros libertos, pueblos originarios, españoles republicanos que acudían en masa a acompañar los sueños liberadores de la opresión colonial.
No fueron “racionales” las consignas federales de nuestros caudillos, que enfrentaron esas racionalidades del poder “civilizatorio” porteño y depredador, aliado a la sumisión colonial de cualquier signo. Lo hicieron con las banderas de Federación o Muerte o Viva la Santa Federación, mueran los salvajes unitarios, con las cuales encadenaron los combates por la libertad de los pueblos prexistentes a la Nación “civilizada”. Los santiagueños lo eran desde el 1550, lo mismo los cordobeses, riojanos, tucumanos, salteños, jujeños que desde entones constituyen un estamento superior a la Nación que es la Patria, en ese caso la Patria Grande de las Provincias Unidas de Sudamérica, como dice nuestra acta de la Independencia Nacional del Congreso de Tucumán.
El mismo Artigas, el primer peronista, en 1813 en la Constituyente instruyó a sus congresales elegidos en asambleas populares en el signo puntual de las propuestas como la libertad de los esclavos, la reforma agraria, la multiplicación de los puertos, el traslado de la capital a las provincias, pero en el marco conceptual de “los más infelices, serán los más beneficiados” y “mi poder emana de ustedes y cesa ante vuestra presencia”, ya en 1815 en la Independencia de los Pueblos Libres de Concepción del Uruguay.
Esas frases resumen los sueños de los pueblos, impulsan la idea de la lucha por un mundo mejor, identifican al enemigo y compactan al movimiento nacional y popular, como hoy cuando los dirigentes populares latinoamericanos son perseguidos, estigmatizados, encarcelados, proscriptos en función de un diseño estratégico del mundo unipolar, que pretende fortalecer el coloniaje imperial. Esos sueños se mantienen bajo el paraguas de las esperanzas de construcción de un modelo social más justo y solidario, el modelo filosóficamente peronista.
Perón resumió sus consignas: “Braden o Perón”, identificación plena del enemigo, además de “Patria sí, Colonia no”, convocando a la construcción de un poder popular organizado bajo la consigna de Comunidad Organizada, “única forma de vencer el sistema demo liberal burgués” en su formulación en el Congreso de Filosofía de Mendoza de 1949, reafirmando la Constitución Nacional de contenido social del mismo año, en dónde los derechos, del trabajador, de la niñez y de la ancianidad, de la propiedad privada como derecho social, figuran en las determinaciones del texto, sin invocaciones vacías e incumplidas como en las constituciones liberales.
Antes los radicales con Alem expresaban “que se rompa pero no se doble” o desde FORJA más adelante derrocado Irigoyen decían: «Somos una Argentina colonial, queremos ser una Argentina libre», todas invocaciones a la construcción de un futuro esperanzador basado en la lucha política contra los enemigos de la Patria.
En este contexto las utopías son una “alto filosófico” (Fornet-Betancourt) para verificar la continuidad del pensamiento de Martí del ”clamor de los pobres de este mundo”, que se plasma en la Filosofía de la Liberación que permitió ser el camino de un pensamiento nuestro, de alto contenido patriótico de Patria Matria Grande, que recuperó los sentimientos compartidos de los pueblos, a los cuales el enemigo, el gobierno de EEUU Comando Sur denomina “nuestros pueblos” a los que defenderán por sus recursos naturales: agua dulce, litio, gas petróleo, proteínas, lo cual expresado a viva voz estremece, pero que es ocultado por los cómplices del coloniaje, que son los ex Medios de comunicación, convertidos en verdaderos factores de poder, cómplices de la entrega y parte en la disputa del mismo.
No es necesario contestar la agenda del enemigo a diario para estar presente en la política, es más, esa práctica hace de amplificador del mensaje adversario, sino que se debe construir diariamente agenda propia, que deje de canibalizar la política internamente, cuando el país se enfrenta a un proceso de degradación democrática y golpe destituyente, que se difumina entre la manipulación, tergiversación, ocultamiento y mentiras de los medios hegemónicos, dejando atrás los temas esenciales. Esos ejes que hacen a los planteos estratégicos del peronismo y sus aliados del movimiento nacional y popular que en conjunto desde la política, el movimiento obrero, los movimientos sociales, los curas de opción de los pobres y villeros, los organismos de DDHH, los empresarios PYMES, van acariciando los mismos sueños.
Esa es la utopía compartida que debe plasmarse en la mesa institucionalizada de conducción compartida, convocada por el conjunto del peronismo y desde Cristina, sin dudas referencia mundial de una estadista, que junto a Lula deben estar en el cuadro de los 20 mejores cuadros políticos del mundo, que es nuestra y peronista.
Todos tenemos errores, lo cual no significa que sacrifiquemos al fuego sagrado a los compañeros que han asumido responsabilidades, que han intentado modificar, en el estrecho margen de maniobra que da ejercer el Gobierno, como explicó Cristina al asumir que sólo el 25% del poder reside en esa representación. Por esa razón levantar las banderas de las utopías y realizaciones que se plantean como necesarias a la construcción de una Comunidad Organizada con justicia social, como poder popular organizado. Ese es uno de los caminos de la liberación nacional y de la posibilidad de enfrentar a un enemigo tan poderoso como brutal e inhumano, como lo demostró en las dictaduras militares y en el período negro de democracia neoliberal macrista.
Entre una racionalidad resignada al “nada se puede”y el “todo mal”, debe oponer el “optimismo de la voluntad” que llena de alegría la lucha política, porque devuelve las ilusiones esperanzada al conjunto del pueblo argentino, sometido a una sucesión de miedos, que están destinados a crear el desasosiego necesario que lleve al caos, situación propicia para aquellos sectores de la dominación que pretenden subsumir la voluntad popular a la relación opresor oprimido, como natural de la condición humana.
Cabalgaron sobre la Pandemia carancheando las medidas sanitarias, bloqueando las vacunas, quemaron barbijos, intentando deteriorar al Gobierno, colocando de rehenes a millones de argentinos que terminaron dando la espalda a la degradación política. Pero cooptaron la Corte Suprema desde siempre, aliándose con el Lawfare impulsado por EEUU. No tienen dudas en desatar la violencia como método de la política, al fracasar el denuncismo perpetuo por agotamiento mediático.
Eso es el enemigo al cual no se lo puede combatir desde racionalidades profundas que les explique que están equivocados porque han logrado instalar un mito, que sólo se logra desmontar con perseverancia militante llena de ilusiones de los caminos a recorrer, en un proceso largo de construcción social y política que consolide la soberanía nacional.
Siempre hay un enemigo, potencias que necesitan del saqueo para controlar el poder hegemónico desplegando para ello un sistema comunicacional que nos hace ver el mundo por el ojo de la cerradura, pequeño de un tercio del mundo real, presionando y creando conciencia de sumisión y dependencia, diciplinando los pueblos o avasallándolos en un mecanismo perfecto de opresión. Eso se llama coloniaje cultural, económicofinanciero e institucional como hoy sucede en nuestro país.
Dejarse abatir por una realidad volcada por el enemigo, es como rendirse sin luchar, bajar los brazos que es lo que pretenden, de ahí surge con fuerza la necesidad de recrear las utopías transformadoras de esa realidad impuesta a través de las luchas sectoriales o totalizadoras con el signo de objetivos utópicos, al parecer inalcanzables, pero que la voluntad de los pueblos siempre consolida en los procesos históricos, más allá de nuestras demandas y ansiedades biológicas, producto de la finitud.
Esas utopías generan en las mochilas militantes la carga necesaria del impulso vital, de ser protagonista de la historia antes que testigo o relator de la misma, no se basa en el misticismo sino en los valores expresados hoy por Francisco, ese argentino Papa que enarbola desde la teología, esas utopías sobre el mundo. Son las que hacen dejar de lado los aspectos circunstanciales para centrarse en los ejes estratégicos de la Patria a construir, de los sueños a realizar, del compromiso a desplegar, junto a la voluntad y perseverancia de estar presente en la lucha, desde la barricada a la reflexión, desde el pensamiento crítico a la organización pero con un objetivo único de forjar el modelo social y productivo solidario, soberano, emancipador de la Patria Matria Grande Liberada.
JORGE RACHID
PRIMERO LA PATRIA
www.lapatriaestaprimero.org
CABA, 8 de marzo de 2023
BIBLIOTECA
Emilce Cuda: Teología, ética y política Ed. Manantial
Leopoldo Marechal: Didáctica de la Patria Ed. Revista de filosofía UBA año Xl N° 28
Juan Carlos Scannone: La filosofía de la Liberación Ed. Chile

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